lunes, 14 de enero de 2013

Nebulosa IC434 o Cabeza de Caballo







El Sábado 12-01-2013 subí a la montaña a 1200m y fotografié la nebulosa Cabeza de Caballo. Se denomina así por la forma central que parece la cabeza de un caballo.
Son 46 fotos de 360Seg, Iso 1600, con Canon 60d refrigerada a -4ºC + Telescopio Takahashi 102 con reductor de focal (unos 30 aumentos).

Para los curioso os dejo, una toma original tal y como sale de la cámara. Como podéis observar el procesado posterior de la imagen tiene su trabajo. La información está en la foto, pero hay que hacerla surgir.
Realizo 46 fotos no para seleccionar la mejor. Se hace así para posteriormente con un programa informático apilarlas y conseguir más señal y menos ruido (grano) de fondo. Si utilizamos una única foto, el ruido de la foto sería horrible y no podríamos hacer surgir toda la información que la foto contiene.
Pensad que la foto está realizada con una cámara réflex digital de aficionado con algunas modificaciones.
En definitiva, no sólo es complicado hacer la foto. Su procesado posterior también tiene su complejidad.

La verdad es que con tantas cosas que hay ahí fuera, somos menos que una gota de agua en un oceano. Por lo menos la astrofotografía, me permite "tocar" un trocito de cielo.

Espero que os guste.

La nebulosa Cabeza de Caballo es una nube de gas fría y oscura, situada a unos 1.500 años luz de la Tierra en la constelación de Orión. mide aproximadamente 3,5 años luz de ancho.
El color rojizo de la nebulosa de emisión se origina por la recombinación de los electrones con los protones de los átomos de hidrógeno. La estrella más brillante, situada a la izquierda de la nebulosa, es la popular Alnitak.
En la foto del entorno se ven también nebulosas de reflexión, que reflejan preferentemente la luz azul de las estrellas cercanas.
En la fotografía también puede verse, en color anaranjado, la Nebulosa de la Flama, en la parte inferior izquierda. Recibe este nombre por su parecido con una hoguera. Un franja oscura de polvo interestelar absorbente se destaca en silueta contra el resplandor de la emisión del hidrógeno y, de hecho, oculta la verdadera fuente de energía de la Nebulosa de la Flama. Detrás de la franja oscura yace un cúmulo de estrellas jóvenes y calientes. Una estrella masiva joven de ese cúmulo es la fuente probable de la intensa radiación ultravioleta que ioniza el gas de hidrógeno de la Nebulosa de la Flama.
En la imagen también se aprecia, debajo dela cabeza de caballo, la pequeña nebulosa NGC 2023, es una nebulosa de reflexión, de ahí su característico color azulado.

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